La gran mayoría de los dueños de negocio piensan que hacer una página Web les traerá nuevos clientes y podrán hacer más ventas. Y esto es factible, pero digamos que ya no es tan fácil. Hoy en día hay mucha competencia y es necesario tener una estrategia.
Por otro lado lado si bien aparecen cada día herramientas que facilitan muchas tareas es verdad que para poder usarlas debes aprender y eso lleva tiempo.
Hoy quiero hablarte de los 5 errores más comunes que cometen los dueños de negocios al querer construir su Web.
- Pensar que crear una Web es tan fácil que hasta tu sobrino de 15 años lo puede hacer.
- Pensar que luego de construir la Web ya tendrá miles de visitas todos los días
- Tener el proyecto en la mente y luego buscar a una persona con conocimientos y decirle que si funciona ganarán mucho dinero.
- Una vez que se tomó la decisión de hacer la Web y contratar al profesional demorarse un siglo en entregar el material para arrancar.
- Tener la mentalidad de que todo en Internet es más barato y por lo tanto no haber tenido una previsión clara de la inversión necesaria.
1- Pensar que crear una Web es tan fácil que hasta tu sobrino de 15 años lo puede hacer.
Como decía al inicio hoy en día aparecen más y más herramientas que facilitan la creación de una Web, pero hay un punto muy importante que se debe tener en cuenta y es que la persona que va a desarrollar el proyecto debe saber lo que hace.
No se trata de tener la idea y ponerse a armar algo sin los conocimientos necesarios y sin, ante todo, tener una estrategia clara.
Eso es lo que hace diferente a un sobrino que un día creó una Web y ahora que lo sabes puedes pensar que es muy fácil y que él te lo puede hacer.
Es como si una persona que porque sabe utilizar Word se considera capacitado para escribir el mejor libro “best seller” en ventas.
Una cosa es saber como funciona una herramienta y otra muy diferente es ser un profesional.
Un profesional del desarrollo de páginas Web ha estudiado y se ha capacitado para entender el funcionamiento de las mejores herramientas que existen. Es más, está constantemente accediendo a nuevos conocimientos, es un nunca parar, siempre hay algo nuevo que aparece y debe estar al día de todo lo que ocurre en su “mundo”.
Es como un médico que debe estar al día de que medicinas o tratamientos se pueden aplicar a cada caso y que novedades se van “cocinando” en su ambiente de trabajo.
En resumen cualquier profesión es así.
Por eso no cometas el error de pensar que tu sobrino puede ayudarte si no es un profesional. Ahora si tu sobrino está capacitado y lleva años de experiencia entonces no hay lugar a dudas, ¿no es cierto?
2- Pensar que luego de construir la Web ya tendrás miles de visitas todos los días
Esto podría haber pasado hace ya algunos años, pero hoy en día te podría asegurar en un 99% que no es así. Es posible que el haber construido tu Web te haya llevado mucho tiempo y esfuerzo pero es como haber construido un edificio de viviendas, ahora que ya terminaste debes armar una estrategia para poner los pisos en venta.
Necesitas entender que tu mercado seguramente es muy competitivo y hay miles de otros empresarios que ya han construido su Web.
La buena noticia es que la gran mayoría no tienen una estrategia adecuada. Y esto es un gran secreto que tu puedes aprovechar.
3- Tener el proyecto en la mente y luego buscar a una persona con conocimientos y decirle que si funciona ganarán mucho dinero.
Esto me ha pasado muchas veces. Hay personas que saben que hace varios años que me dedico a crear páginas Webs y asesorar a clientes en sus estrategias de marketing.
Entonces me llaman emprendedores que tienen una “idea” y me proponen una sociedad o una alianza donde yo debo hacer el trabajo y si luego el proyecto funciona “nos llenaremos de oro”.
Es un lindo sentimiento que las personas se acerquen con sus ideas y te tengan en cuenta, pero lo que me parece que no está bien es que quieran hacer el proyecto sin aportar nada más que la idea. Que no digo que no sea importante y tenga su valor, pero que en mi punto de vista no es suficiente.
Hay miles y miles de ideas buenas, pero es bien sabido que de todas ellas, solo prosperarán un pequeño puñado. Hay muchas variables a la hora de poner en marcha un proyecto. No es justo que el profesional deba invertir un montón de tiempo en desarrollar la implementación informática sin percibir por ello unos honorarios.
Al final de cuentas es una idea y llevar en buen término dicha idea lleva tiempo.
4- Una vez que se tomó la decisión de hacer la Web y contratar al profesional demorarse un siglo en entregar el material para arrancar.
Es verdad, me ha pasado muchas veces que llevo hablando con un posible cliente días y días y finalmente toma la decisión de armar su Web, pero al momento de entregar el material para empezar a armar todo se demora semanas.
Y esto es así porque el cliente no tiene claro lo que quiere y este para mi es un gran error. Es por ello que decidí ya hace algunos años trabajar con una estrategia clara. Nos reunimos con el cliente y diseñamos que contendrá el la Web y como se debería ubicar los diferentes apartados. Luego es mucho más fácil empezar con el desarrollo.
5- Tener la mentalidad de que todo en Internet es más barato y por lo tanto no haber tenido una previsión clara de la inversión necesaria.
En realidad el crear una página Web se debe comparar al crear un negocio en el mundo tradicional. Hay que invertir tiempo y dinero. Hay una idea muy integrada en la mente de las personas de que hacer una Web es algo económico. Es verdad que los costes son diferentes, pero si quieres tener resultados de verdad debes tener la mentalidad de un empresario.
Armar la Web requiere una inversión. En tiempo y en los honorarios del profesional.
Pero por sobre todo no cometas el error de querer hacer todo tu mismo, te aseguro que los empresarios de éxito saben delegar. Tú eres una persona muy buena en lo que haces, pero “zapatero a tus zapatos”.
Y con esta frase termino este artículo, espero que lo hayas encontrado interesante.
Ahh… Aquí te dejo el podcast donde junto a mi amigo Luis Ornelas hablamos acerca de este tema.